Fashion con acento

La moda es como el cine, todo el mundo opina sobre ella. Parece que todos tengamos algo que decir al respecto, y así es, la moda está presente en la vida de todos. De una manera u otra.

Para cualquier comentario, sugerencia, idea, información, no dudéis en escribirme: fashionconacento@gmail.com

Me declaro básica

domingo, 8 de enero de 2012



Cada temporada la moda tiene sus niños mimados y sus enemigos, y aunque estos varíen de las maneras más insospechadas, hay una varible que permanece inalterable; y son los bolsos más deseados, los etiquetados como "it"- bags.



Quién luce el susodicho bolso, se convierte al instante en un ser estiloso y envidiado.¿Podríamos denominarlo bolso- varita- mágica? Él te toca, y en Reina de la Moda te transfiguras. Este hecho no solo sucede en las semanas de la moda y entre estilistas, editoras y famosillas; a pie de calle pasa lo mismo.

En el primer caso, actualmente tenemos a Céline en el podio, sea cual sea el modelo que lance; terreno cedido por las carteras plastiqueras de Christopher Kane y los PS1 bags de Proenza Schouler.

También los hay que son eternos y no bajan del top, como el Birkin de Hermès o el 2.55 de Chanel. A nivel pueblo llano, y gracias a fechas señaladas y pagas dobles, hay quién mataría por un shopper de Carolina Herrera o un modelo de los ya considerados clásicos de Bimba y Lola. Pero, ¿por qué esta manía por bolso de marca?


El Luggage de Céline.


El Classic de Céline. Rey de Reyes.

Cartera de Christopher Kane.

Vale, un bolso es un complemento en muchos casos práctico pero, ¿Siempre?. ¿Debemos aceptar la tiranía de cargar con ellos incluso si se imponen los maxibolsos? ¿No podemos ir al cine con las llaves, un monedero y el móvil en el bolsillo?

Soy consciente de que muchos días laborables todas acarreamos con el kit de supervivencia, más trastos del trabajo, más lo necesario para el gimnasio pero, si el peso del contenido ya es más que considerable, ¿por qué cargar con un bolso que encima solito ya pesa lo suyo?


Hace tiempo que me negué a lucir bolsito de marca porqué soy más de invertir en zapatos y, últimamente en complementos. Por ello, he decidido cargar con lo básico, que para mi es una bolsa de algodón con asas. Además de ahorrar en peso, puedes compartimentar los trastos en diferentes bolsas, ya que puedes cargar con 2 e incluso 3 en el mismo hombro. Y ahora, resulta que en tiempos de recesión económica se impone el sentido común y hasta el New York Times habla de la avalancha de tote bags, las susodichas bolsas básicas de algodón como del"it" bag de la temporada.


A esta no le haría ningún asco, sobre todo porque significaría que he
tenido la suerte de visitar la exposición, cosa que todavía no he hecho...


Un poco menos básica, pero salivo al verla.

Me uno al consumo responsable y a no cargar con pesos innecesarios, así que voto por seguir con el 100% algodón a cuestas. Encima, tengo una nueva tradición, que es no comprarlas jamás, sino éstas que han de ser regaladas. Así, ganan significado, no por ser de tal diseñador o el bolso prefe de tal modeli, sino porque son el regalo de alguien especial o porque las ha diseñado tal amigo o, por la simple razón de que es la manera fácil y gratuita de hacerle propaganda al amigo emprendedor.

En mi haber tengo desde las más cutres; de tabernas alemanas, o encontradas en estaciones de tren, pasando por las de la tienda de discos de unos colegas, hasta la del nuevo proyecto de joyería de una amiga. Cada cual tiene su porqué, han costado cero patatero y son de lo más práctico y original. ¿Alguien se niega a declararse básico?


Sarah Jessica modo intelezzztual

4 comentarios:

Laetitia dijo...

Pues el del Moma es chulísimo, eh? ;P

Muaaaaaaaaaaaaaaaaa

Cristina PS dijo...

Jajajaja yo llevo de estas a punta pala! tienen el tamaño perfecto para los libros.

CaféOlé dijo...

Ni que me hubieras leído el pensamiento!Precisamente el otro día encontré una negra que me dieron en no sé qué tienda y me pareció de lo más práctica para meter dentro unas cuantas cosas que tenía que llevar al coche.

Es verdad que muchas veces el bolso es otra ¨piedra¨ más en la chepa porque a menudo suelen pesar un quintal aún estando vacíos.

Sin embargo, me encantan aunque dentro de un orden: creo que jamás invertiría el sueldo de varios meses en un bolso, por muy de marca que fuese. Me importa un pito no ser ¨cool¨ por no ir enarbolando el último bolso (o zapatos, o complemento, o modelito) de moda como si fuese una bandera... de hecho, esa actitud (sobre todo cuando la veo a pie de calle) cada vez me parece más ridícula: no tiene más estilo quien más ropa de marca tiene en el armario.

Pero bueno, ésa es sólo mi opinión.

Un beso.

Broken Stylee dijo...

Celine Celine! <3